Cómo guardar un kimono

El kimono puede usarse durante mucho tiempo si se guarda correctamente. Para ello, es importante guardarlo con cuidado de que no se dañe.
Hay cinco elementos que pueden dañar los kimonos: la humedad, los insectos, los residuos de proteínas, los gases y los rayos ultravioleta.
Te explicaremos cómo guardar y cuidar tu kimono.
Cuida los kimonos antes de guardarlo

Para mantener los kimonos en buenas condiciones durante mucho tiempo, revíselo después de usarlo para ver si tiene suciedad y, si no tiene suciedad, séquelo a la sombra para eliminar el sudor.
Asegúrese de que no haya manchas en el kimono
Después de usar el kimono, primero cuélguelo en una percha y revise toda la prenda para detectar posibles manchas.
Incluso si no recuerdas haberlo ensuciado tú mismo, asegúrate de revisarlo una vez.
Si nota alguna suciedad en este momento, envíelo a limpiar.
Es difícil encontrar una tintorería especializada en kimonos en España.
Consulte en una tienda especializada que pueda limpiar la seda con suavidad.
Secar a la sombra para eliminar el sudor
Si la prenda está limpia, séquela a la sombra durante medio día o toda la noche para eliminar el sudor. Asegúrese de secarla a la sombra para evitar la decoloración por los rayos UV.
Colgar un kimono durante más de una noche hará que pierda su forma, por lo que no es buena idea dejarlo colgado durante mucho tiempo.
Si nota arrugas importantes en su kimono después de secarlo a la sombra, es muy probable que quede mucho sudor en la tela.
Dejar sudor en el kimono puede causar manchas y deteriorar la tela, por lo que le recomendamos que lo elimine en casa o que lo haga un profesional.
Cómo quitar el sudor de un kimono en casa
Coloque una toalla de baño en el suelo o una mesa y extienda el kimono encima. Asegúrese de que el interior del kimono quede hacia arriba, ya que es más probable que se ensucie con el sudor.
Humedezca una toalla con agua tibia (a unos 35 °C) y escúrrala bien.
Tome una toalla bien escurrida y frote suavemente la zona manchada de sudor. Evite frotar o golpear con demasiada fuerza.
Para finalizar, vuelva a secar suavemente la zona con una toalla seca.
Cuelgue el kimono en una percha diseñada para ropa japonesa y déjelo secar naturalmente en un lugar bien ventilado, fuera de la luz solar directa.
Cómo guardar los Kimonos

Se doblan cuidadosamente para eliminar cualquier arruga, se envuelven en papel y se guardan en una cómoda de paulownia.
Envuélvalo en papel de Washi y guárdelo
Dobla cuidadosamente el kimono que quieras guardar.
La regla básica para guardar kimonos es envolverlos en papel hecho específicamente para kimonos.
Es un papel utilizado para envolver kimonos, elaborado a partir de papel washi.
El papel washi es muy transpirable y absorberá la humedad de los kimonos, manteniendo un entorno de almacenamiento apropiado, así que asegúrese de preparar un papel de regalo para cada kimono.
Una cómoda japonesa de paulownia es ideal para guardar kimonos.
La madera de paulownia tiene la capacidad de regular la humedad, protegiendo a los kimonos del moho causado por la humedad.
Los cofres de paulownia son difíciles de encontrar en España, por lo que guardarlos en cajas de plástico no supone ningún problema.
Sin embargo, los estuches de almacenamiento de plástico a menudo no son lo suficientemente grandes para acomodar el ancho de los kimonos.
Es imprescindible preparar un estuche lo suficientemente grande para poder guardar el kimono cómodamente sin que se doble, y hacer uso de elementos como sábanas antihumedad.
Ventilar regularmente
También es importante sacar los kimonos periódicamente y dejarlos ventilar para eliminar la humedad.
Para que tu kimono dure más tiempo, es importante ventilarlo regularmente y evitar que se acumule humedad.
En un día seco después de tres días soleados consecutivos, saque el kimono y séquelo a la sombra durante 2 o 3 horas, luego dóblelo y guárdelo.
También puedes reducir la humedad en aproximadamente un 10% simplemente abriendo todos los cajones de una cómoda u otro armario y encendiendo un ventilador durante unos 10 minutos.
Acerca de los repelentes de insectos
El alcanfor se usa comúnmente como repelente de insectos.
El alcanfor es un cristal blanco volátil, fragante y translúcido que se extrae del árbol del alcanfor. Tiene un aroma distintivo y refrescante similar al de la menta y se ha utilizado como repelente de insectos para muebles y estatuas budistas.
También tiene un efecto desodorante y es 100 % natural, sin químicos.
El alcanfor fue el tercer producto de exportación más importante, después del oro y la plata, durante el período Edo.
Consejos para guardar y conservar el kimono para evitar los cinco factores que los dañan
Explicaremos los cinco factores que pueden dañar el kimono.
Almacenamiento lejos de la humedad
España tiene menos humedad que Japón, lo que lo convierte en un buen entorno para guardar kimonos.
Sin embargo, si no usas tu kimono con frecuencia, asegúrate de ventilarlo regularmente para eliminar la humedad.
No guarde los kimonos junto con otras prendas, accesorios, cosméticos, etc.
Los kimonos con tela gruesa (furisode, etc.) deben guardarse en el estante superior de la cómoda.
Almacenamiento para evitar insectos
Los materiales de lana son propensos a atraer insectos.
Al guardar los kimonos, es necesario separar los de lana de los que no son de lana y evitar guardarlos junto con ropa de lana, mantas, etc. Utilice repelente de insectos según sea necesario.
Almacenamiento para evitar residuos de proteínas
Los residuos de proteínas se refieren a una condición en la que la suciedad, como las manchas de comida o bebida derramada o el sudor, se han absorbido en el kimono.
Después de ponerse el kimono, retire con cuidado el polvo del dobladillo con un paño seco y asegúrese de que no haya suciedad.
Almacenamiento lejos del gas
El gas puede provenir de repelentes de insectos, pequeños artículos de plástico, caucho, etc.
Esto hará que el color de la prenda cambie.
Asegúrese de utilizar solo un tipo de repelente de insectos y no guarde los kimonos con plástico o goma.
Almacenar lejos de los rayos UV
Los rayos ultravioleta están contenidos en la luz solar, así como en las lámparas fluorescentes y las bombillas incandescentes.
La regla de oro para los kimonos es no dejarlos tirados en la habitación, sino guardarlos en un lugar oscuro y, si se cuelgan afuera, secarlos a la sombra.
Teniendo en cuenta los puntos que hemos presentado, podrás mantener tu preciado kimono en buenas condiciones durante mucho tiempo.
Por favor, haga que su preciado kimono dure más tiempo.


